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Tutoriales de ayuda a la hora de hacer un cómic.

Del guión al cómic: el esbozo.

Ya falta poco. Empezamos buscando una idea y ahora que tenemos un guión y sabemos lo que queremos contar vamos a empezar a esbozar como previo paso a empezar nuestro cómic.

Nuestro guión debe cumplir algunos requisitos antes de empezar a esbozar. Los personajes deberíamos tenerlos a estas alturas trabajados (nombres, pasado, motivaciones, carácter, aspecto…), preparados los escenarios en los que transcurrirá la historia (esbozos de los mismos) y los diálogos. Los diálogos deben permitir el transcurso de la historia, servir para caracterizar a los personajes (sus frases hechas y formas de hablar) y sobretodo lo más breves posibles porque restarán espacio en la página (la página es finita). Nos facilitará también el trabajo el tener el guión segmentado en escenas porque permite hacernos a una idea de cómo queremos que quede el resultado final (dividir y profundizar en las mismas).

Llegados a este punto es el momento de hacer un planning de lo que será nuestro cómic. Yo recomiendo hacerlo a golpe de esbozar. A la hora de esbozar dibujamos a mano alzado con lápiz lo que será la página definitiva (nos servirá de guía).

Yo cojo un folio DINA-4 y lo divido por la mitad. Para esbozar utilizo las dos caras del folio de modo que con un DINA-4 esbozo 4 páginas del futuro cómic. En cada uno de las cuatro partes en que divido el folio dibujo un margen que representa el margen que dejaré en la página definitiva (esto es importante porque no podemos dibujar en toda la superficie del papel debemos dejar márgenes para facilitar la fotocopia y la impresión y además facilitar la lectura de nuestro cómic –si no usamos márgenes los dibujos se solapan y esto puede dificultar la lectura-).

Ya lo tienes todo preparado, ahora toca esbozar, dibujar, borrar y volver a dibujar hasta que tengas claro que es lo que vas a hacer en el original.

Algunas consideraciones para acabar:

Importante recordar el número aproximado de páginas que van a formar el cómic. Sobre todo si lo queremos presentar a un concurso, que respete las normas de aquel.

Decide si en la primera página empezará la acción o la dejas como portada o presentación de tu obra (pues si no vas a dejar portada la primera página debe incluir espacio para el título de la obra).

Cuando completes el planing y empieces con el original es recomendable armarte de más folios en sucio para esbozar. Y es que antes de empezar en el original puedes querer esbozar algo a un espacio más grande para tener una imagen más clara del resultado final. Todo esto nos va a ayudar a la hora de dibujar en el original pues teniendo una idea concreta de lo que queremos evitaremos estar dibujando y borrando más de la cuenta lo que degrada el papel y empobrece el resultado final.

Saludos y … ¡A esbozar!

PD: Iba a poner los esbozos de mis cómics… pero los tengo tan guarreados que el escaner es incapaz de «ver» nada…

Creando el guión de nuestro cómic.

Prácticamente cualquier idea puede ser plasmada como cómic. El otro día introducía el tema de cómo hacer nuestro propio cómic. A la hora de hacer un cómic hay dos partes muy diferenciadas: la idea o guión y el dibujo que es el medio con el cual expresaremos dicha idea. Hoy comentaremos acerca del guión que es lo que origina el cómic.

El tema del guión se puede abordar desde dos situaciones: tengo una idea que quiero relatar y quiero hacer un cómic y busco engendrar ese guión. En ambas situaciones es importante el número de páginas. Si nuestra idea es compleja requerirá muchas páginas y si es sencilla pocas, incluso si es muy muy sencilla se puede expresar en una viñeta. Esto debemos estudiarlo bien. Al otro lado tenemos que queremos crear el guión de cero, pues primero debemos platearnos la longitud de la historia que queremos crear. De modo que vamos a analizar cómo es el guión para los distintos tipos de cómic que hay según la longitud.

Cómics de una viñeta, pocas viñetas o una página:

Es típico del cómic de periódico, la clásica tira cómica o no tiene por qué ser cómica, ya me entendéis. Son breves y buscamos transmitir una idea. Puede ser un chiste o bien una reflexión.

Cómic de una viñeta. De el roto.
Cómic de una viñeta. De el roto.
Cómic de pocas viñetas: Garfield.
Cómic de pocas viñetas: Garfield.
Cómic de una página: Garfield. Muy parecido al anterior.
Cómic de una página: Garfield. Muy parecido al anterior.

El roto es capaz de plasmar una idea en una viñeta, sencillo y magistral.

Por otro lado en el ejemplo con Garfield pese a que la idea es sencilla usa más viñetas para mostrar un movimiento: Garfield valorando lo que recibe de su dueño.

Cómics de un número escaso de páginas: La historia corta.

Un paso más allá en cuanto a duración de la historia: la historia corta. En este formato suelen presentarse las obras a concurso. Son ideas más complejas, ya podemos hablar de contar una historia (no una historieta como en el caso anterior).

Personajes: sabemos que hay varios tipos de personajes. Cuantos más personajes la historia más se complica. De modo que en la historia corta usaremos los personajes imprescindibles porque no tendremos tiempo de desarrollarlos si ponemos demasiados personajes. Tipos: protagonista/s, secundarios y antagonistas. Lo ideal en una historia corta es limitarse a los personajes imprescindibles para que la historia se produzca. Además, y en esto me entretendré otro día, los personajes deben ser lo más atrayente posible para los lectores (esto también dependerá de nuestro guión y de vosotros mismos haced uno que os guste mucho y os parezca atrayente). El resto de personajes no imprescindibles sólo deben usarse para describir el mundo de los protagonistas y que la historia tenga sentido.

La historia: Dado que ahora hablamos de un cómic de algunas páginas esta no debe ser muy compleja o no podremos desarrollarla. Con la experiencia podremos contar más en menos páginas. Por poner un ejemplo la idea para Capitán Tsubasa (Oliver y Benji por estos lares) de que un chaval de barrio llega a ser un gran futbolista no es válida para una historia corta porque supone un gran recorrido desde sus partidos en la escuela hasta jugar en las grandes competiciones. Debemos centrarnos en un acontecimiento importante alrededor del cual gira la historia (una confesión de amor, una lucha…).

Oliver y Benji. Prototipo de historia larga.
Oliver y Benji. Prototipo de historia larga y de partidos interminables.

Introducción-nudo-desenlace: Los puntos básicos en los que desarrollaremos la historia. En nuestra historia corta nos centramos en lo esencial.

Cómics largos: las series.

Los cómics largos o series son historias largas que se segmentan en sagas y capítulos. Este cómic es el que más libertad da al autor. Veamos varios ejemplos.

En Oliver y Benji la historia es larga porque el objetivo del protagonista (ser un futbolista de élite) lleva su tiempo y hacer muchos partidos y la serie nos lo cuenta. Algo parecido pasa con cualquier serie de deportes donde empezamos con el nivel amateur y queremos que se haga profesional. Esto es lo que llamaríamos una historia central.

En las historias largas a parte del eje central de la historia del argumento primario, por así decirlo, nacen otras secundarias (siguiendo el ejemplo la rivalidad entre Oliver y Benji que luego se hacen amigos).

A lo largo de los argumentos primarios y secundarios desarrollaremos a los personajes secundarios que le darán sentido.

Otro ejemplo: Monster de Naoki Urasawa. El eje central es la huída de la justicia del cirujano Tenma Kenzô y la búsqueda del «monstruo» (el verdadero asesino). Alrededor de ese eje central la historia se va desarrollando a través de nuevos personajes relacionados con los hechos a través de los cuales cada vez conocemos la historia con más detalle.

Dragon Ball: Serie larga por antonomasia.
Dragon Ball: Serie larga por antonomasia.

Series como Dragon Ball o Naruto son series largas que han utilizado otro esquema. El argumento principal es la superación de los personajes, mejorar y ser más fuertes. A partir de aquí se desarrollan sagas y cada una tiene su argumento (en Dragon Ball todo recordamos sagas como la de Freezer, Célula o Bu en estas sagas el argumento era batir al nuevo adversario que ponía en riesgo el universo conocido y parte del extranjero ¬¬ siempre me hizo gracia esa frase de Dragon Fall).

Un capítulo: El capítulo es la unidad básica de la serie larga. En el desarrollaremos el argumento principal de la serie o de la saga bien sea directamente o indirectamente al relatar un evento accesorio o complementario. Lo importante es que esta unidad también tenga su propia introducción-nudo-desenlace para que el capítulo tenga atractivo para el lector en sí mismo (recordad que si el primer capítulo no gusta no leerán el segundo por mucho que sea mejor).

Resumiendo:

Tenemos un guión y según sus características tendremos un cómic de mayor o menor extensión. Sea cual sea la extensión recordemos siempre el esquema básico introducción-nudo-desenlace. Si es corta usaremos pocos personajes y cosas sencillas y si es larga podremos usar personajes secundarios, argumentos secundarios, etc.

Pero todo esto no es más que un comentario sobre algunas generalidades, cada obra es única.

¡Ánimo! ¡Escribid mucho!

Saludos.

Quiero hacer un cómic… ¿Cómo?

Bueno hoy quería arrancar definitivamente el funcionamiento del blog. Mucho me temo que si llega a leerme alguien quizás tenga que rescatar en ese momento estos primeros post y rehacerlos pero bueno, lo mejor para aprender es intentarlo.

Hoy quería ayudaros con la tarea de hacer un cómic. Antes de empezar dejar claro que lo que iré escribiendo es fruto de mi experiencia personal y lo que he leído al respecto y tendré muy en cuenta si alguien me escribe o deja un comentario que amplía el tema, que deje alguna pregunta u opinión sobre el post.

Vamos al asunto. Bien, queremos hacer un cómic. Llegados a este punto puede que te encuentres en una de estas dos situaciones: 1) tengo una idea brillante (¡qué sí! ¡que es brillante!) o 2) quiero hacer un cómic, pero no se me ocurre nada.

Profundicemos un poco en el primer punto. Si quieres contar algo hay muchas formas de hacerlo. Tienes la prosa, el verso, corto/película, ilustración… Evidentemente la ilustración no da juego a contar gran cosa más que a demostrar nuestro nivel artístico y para mostrar más que eso hay que ser uno de los bueno por lo complicado que resulta en una imagen estática conseguir transmitir algo. Para el corto/película ni que decir lo complicado que es pero es un buen medio para desarrollar una historia. Tenemos imagen, texto y encima lo tenemos en movimiento en un formato apetecible dado el escaso esfuerzo que requiere su visionado. En cuanto al verso requiere mucha habilidad, dominar la métrica y la rima y no vamos a tener imágenes ni nada que ayude. La prosa permite contar prácticamente cualquier cosa ahora bien como la anterior no tiene apoyo visual. ¿Qué medio elegimos para contar nuestra historia? Eso vendrá determinado por lo que queramos contar. Si es un sentimiento (triste o alegre) y pintamos muy bien una ilustración es suficiente y puede quedar muy bien si estamos  inspirados (luego hablaremos de la inspiración…) o quizás un poema. Imaginemos que es más complicado y queremos que tenga acción. Bueno ya nos acercamos a lo que hace falta para hacer un cómic. Pero, por favor, cualquier idea que tengáis escribidla que luego pasa lo que pasa a uno se le olvida y ya la hemos liado.

¿Por qué elegir hacer algo en el formato cómic? Comparando con los otros medios para hacerlo tenemos que es, según los medios que elijamos, barato (si lo comparamos con un corto además es más sencillo porque no nos tenemos que desplazar), permite poner texto al contrario que la ilustración, permite mostrar MOVIMIENTO (importante sólo el cómic y los cortos/películas permiten esta opción así que por favor si hacéis un cómic explotadlo y lucid mucho movimiento) y desde luego imágenes.

Naturalmente, y cada vez se ve más, la misma historia se puede adaptar a diversos formatos (de esto también me gustaría hablar otro día, de las adaptaciones) pero bueno hemos partido del supuesto de que queremos hacer un cómic.

Ahora retomemos el segundo punto, tenemos claro lo del movimiento, que queremos dibujar y escribir… en definitiva hacer nuestro cómic. ¿Qué hacemos? ¿De dónde sacamos la historia? ¿Y los dibujos? A lo largo de los tutoriales profundizaremos en ambos puntos pero hoy dejemos un par de cosas claras. Y es que ambas cosas requieren, como todo en esta vida, mucha práctica.

En cuanto al dibujo practicad todo lo que podáis. Dadles vueltas a esos personajes que os rondan. Dibujadlos una y mil veces y no importa que no queden del todo bien porque recordad que estáis ensayando, que os estáis entrenando. Probad con varias posibilidades, varios peinados y complementos, etc a ver qué queda mejor.

Vamos con la historia, el guión. Reitero que cualquier idea que se os ocurra la escribáis. Si se os ocurre un personaje muy chulo, escribid cómo es. Si se os ocurre una escena que os interese contar pues lo mismo. Lo primero a la hora de hacer un cómic es tener escrito lo que se quiere contar. Una vez lo tenemos escrito y pensamos que es todo lo que queremos contar podemos empezar a hacer un planing de cómo será el cómic antes de ponernos a dibujarlo, pero eso ya lo trataremos otro día.

Bien resumiendo y para acabar por hoy: el cómic tiene imagen, texto, movimiento y numerosos recursos que nos permiten contar una historia. A la hora de hacer uno debemos recordar estos elementos para trabajarlos en nuestro cómic. Nuestro cómic será reflejo de nuestro dibujo y nuestro guión. Hay que practicar. Dibujar una y mil veces y escribir todo lo que se nos ocurra.

Os dejo por hoy, recordad ¡Id practicando!

Saludos.