Dragon Ball Origins. NDS. Análisis/Opinión

La NDS está de enhorabuena con este nuevo juego inspirado en las aventuras con las que empezó la célebre Dragon Ball.

DBO: Carátula del juego
DBO: Carátula del juego

La línea argumental del juego se centra en el inicio de la serie cuando Goku conoce a Bulma y su primera búsqueda de las bolas de Dragón y sigue después de esta búsqueda con el entrenamiento del maestro Mutenroshi (duende tortuga) con Krilin hasta terminar con el primer gran torneo de artes marciales en el que participan Goku y Krilin.

Al igual que en la serie nos encontraremos en ese viaje por las bolas de dragón con Oolong, Yamcha, Puar, el malvado Pilaf etc. Es muy fiel a la serie lo que se agradece y con lo que consigue hacer las delicias de los fans de la serie.

Escena de animación donde Goku conoce a Bulma
Escena de animación donde Goku conoce a Bulma

Gráficamente el juego es de lo mejorcito que ofrece la NDS aprovechando al máximo la capacidad de esta. Me atrevería a decir que es de los mejores juegos de la consola en este aspecto.

Además el uso de las dos pantallas también es impecable tanto en las escenas de vídeo donde vemos la acción desde dos puntos de vista o desplegándose el vídeo en las dos pantallas. Y no sólo esto durante el juego la pantalla superior nos muestra la zona de la pantalla y se desplazará con nosotros lo que nos permite ver dónde nos adentramos.

La doble pantalla nos permite ver la zona del mapa a dónde nos dirigimios y podemos incluso atacar a distancia gracias a esto.
La doble pantalla nos permite ver la zona del mapa a dónde nos dirigimos y podemos incluso atacar a distancia gracias a esto.

El sistema de juego es similar al Zelda de NDS utilizándose el lápiz táctil para jugar. Si bien también se puede usar la cruceta para mover a Goku es muy imprecisa y no permite mover a Goku en todas las direcciones. Los únicos botones que tienen interés son L y R para acceder al menú y cambiar entre bastón y luchar sin arma, aunque ambas cosas se hacen muy bien con el lápiz táctil.

Y cuando lo comparo con el Zelda no es sólo en cuanto al manejo, también en el desarrollo. La mayor parte de las pantallas transcurren en terrenos y cavernas donde deberemos mover rocas, accionar interruptores, resolver minipuzzles para poder avanzar.

Sin embargo no se puede decir que este juego sea un Zelda sobre Goku porque no llega al nivel de complejidad del Zelda, es mucho más sencillo y limitado que aquel.

Goku dándole su merecido a uno de los enemigos del juego.
Goku dándole su merecido a uno de los enemigos del juego.

En muchas pantallas Bulma nos acompañará. Deberemos cuidar de ella porque si su vida llega a cero se acaba la partida. No tendremos control sobre ella pero la podemos usar: cuando su barra de Ki (la barra amarilla de abajo) esté llena si la tocamos ella lanzará un ataque con el arma que le hayamos equipado. Al principio será una escopeta pero luego podremos acceder a otras armas (lanzamisiles, armas para recuperar vida, aumentar la capacidad de ataque…). Pero no todo son ventajas de que Bulma nos acompañe, porque ella sola se va donde quiere poniéndose en peligro y no nos dejará explorar el escenario tranquilamente. Además con pases el lápiz táctil cerca de ella disparará y desperdiciara su ataque contra el aire para luego tardar en volver a rellenarse su barra de vida.

Las técnicas de combate de Goku y su manejo son otro punto importante a la hora de hablar de este juego. Tenemos multitud de golpes con el bastón y sin armas (la estrella, por supuesto, el Kame-hame-Ha), voltereta etc. Pero la gran pega de este juego es sin duda el control. A veces no responden del todo bien y además hay veces que se confunden unos comandos con otros (por ejemplo cuando levantamos un objeto Goku a veces no sabe si tocamos un punto del mapa para que se desplace o para que lance el objeto en esa dirección lo que resulta un problema en alguno niveles como en el reparto de leche para el duende tortuga).

El juego se divide en capítulos y subcapítulos. Cada vez que completamos un capítulo se desbloquea otro (u otros, en ocasiones desbloqueamos varios). En el menú de capítulos podremos elegir qué capítulo jugar pudiendo rejugar cuantas veces queramos las pantallas. En este mismo menú podremos acceder a la tienda y a nuestra colección de estampitas del juego.

Una pantalla ofrece varios desafíos. Por un lado llegar al final de la misma (pasárnosla). A destacar las luchas del juego que son muy entretenidas y a veces llegan a resistirse suponiendo un interesante desafío. Además habrá cofres ocultos de número variable en cada nivel del juego indicándose cuantos cofres hay en la pantalla. Por último según el tiempo que tardemos en pasar la pantalla se nos da un rango de S que es el mejor hasta la E. Según el rango nos recompensarán con un objeto (una estampita). Además habrán ítems ocultos al destruir objetos del escenario: dinero, estampitas, vida…

El juego permite rejugarlo cuantas veces queramos ofreciendo el desafío de mejorar nuestro tiempo.

Además tenemos la colección de 200 estampitas para coleccionar y podemos conectarnos con otro amigo que tenga el juego e intercambiar estampitas.

Ahora toca resumir y hacer una valoración final. Estamos ante un gran título de NDS. Es fiel a Dragon Ball metiéndonos de lleno en la mítica historia de la serie. Resulta entretenido y divertido. Los gráficos son de lo mejorcito de la consola. Ahora bien no llega a la altura de un Zelda a ningún nivel. Y para acabar tenemos a una Bulma encabezonada en entorpecer nuestra marcha (sólo es útil cuando ya te has pasado una vez la pantalla y quieres batir tu récord pues ella marca el camino) y un control que puede fallar cuando menos te lo esperas o en el peor momento. Sin duda lo peor del juego es en la pantalla 3-3 tener que acertar un espejo con el bastón mientras te arrastran las arenas, podéis estar media hora intentándolo. Por lo demás es un juego muy entretenido y recomendable sobre todo si eres fan de Dragon Ball.

En youtube hay gran cantidad de vídeos incluso gente que ha colgado pantallas enteras.